El mejor colofón de un recorrido por la antigua Bética lo puede poner el viajero cuando visite la punta de Cádiz, en concreto de Baelo Claudia, a 12 km al norte de Tarifa. La fundación de la urbe, estrechamente vinculada al mar, tuvo lugar a finales del siglo II antes de Cristo y se desarrolló al amparo del comercio con el norte de África, aunque su principal fuente de riqueza se basó en las industrias de salazón de pescado y la fabricación y comercialización de garum, la salsa más apreciada por los romanos.
Declarado Conjunto Arqueológico por la Junta de Andalucía en 1989, su edad de oro llegó bajo el mandato del emperador Claudio (41-54), de quien recibió la categoría de municipio. Este, ejemplo perfecto del urbanismo arquetípico romano, fue diseñado sobre las coordenadas esenciales del cardus maximus (de este a oeste), en cuya intersección se sitúa el foro con los principales edificios administrativos, religiosos y comerciales (basílica, archivos, templos capitolios, templo de Isis, mercado…)

A esta ristra de edificios hay que añadir, para interés del visitante, el teatro, las termas, acueductos y zonas de las industrias pesqueras, englobado todo en el interior de una muralla que acota una superficie de más de 13 hectáreas flanqueado por torres. Tenía cuatro puertas de acceso, en la que sobresalía la puerta este o Puerta de Carteia y la de Gades, al oeste. Ambos accesos delimitaban el decumano máximo de Baelo.
En la parte baja del yacimiento arqueológico se encuentra el sector monumental, que situaba el teatro en la zona de mayor pendiente para aprovechar la inclinación del terreno en la construcción de las gradas. Mientras, en la parte alta de la ciudad los historiadores consideran que pudieron ubicarse las viviendas de la plebe. Todavía se conservan las factorías de salazón, que dieron a Baelo Claudia su renombre, así como el mercado, las termas y uno de los tres acueductos que la abastecieron de agua.
En el lado norte del foro se situaba una terraza o rostra, con una fuente monumental revestida de mármol. Unas escalinatas nos llevan a los templos de la Tríada Capitolina (Júpiter, Juno y Minerva) y el templo de Isis, señal del auge de los cultos orientales. Los templos de la Tríada contaban cada uno de ellos con acceso propio independiente a través de gradas que comunicaban con el pórtico que precedía a la cella o sala de culto.

La zona oeste del foro albergaba el archivo municipal o tabularium, una sala de votaciones, la Curia y una sala de reuniones del senado local. Por su parte, en el lado este de la plaza pública se ubicaban las tiendas o tabernae. El mercado constaba de un patio central con diez tiendas laterales, además de otras cuatro tiendas sitas que miraban al exterior, en la fachada porticada.
Se cree que las murallas no tenían función defensiva, sino delimitadoras del espacio urbano de la ciudad. Contaba con cuatro puertas de acceso, destacando la puerta este o Puerta de Carteia y la de Gades, al oeste.
La ciudad de la Bética entró en un proceso de decadencia progresivo que se inició a mediados del siglo II, con seguridad favorecido por el terremoto que asoló la urbe en el siglo III, y tras una paulatina regresión culminó con el abandono poblacional de la ciudad hacia el siglo VII.

La relevancia arqueológica de Baelo Claudia destaca por la gran cantidad de elementos conservados que permiten una panorámica completa de la antigua polis romana. La visita al yacimiento se inicia en el centro de recepción de visitantes del museo, que consta de dos salas de exposiciones permanentes y una para muestras temporales. En la planta superior se ofrece un marco general de la antigua ciudad romana.
En la planta inferior se encuentran dos espacios expositivos permanentes: el primero, dedicado a la religión, el urbanismo y la economía; y el segundo dedicado a la vida social de la ciudad. El conjunto cuenta además con una biblioteca especializada en el mundo clásico romano.
Si se desea contemplar bien de cerca el conjunto patrimonial y disfrutar de la experiencia, el viajero tiene a su disposición dos teléfonos de información: 956688530 y 956688540, un fax: 956688560, una dirección de correo electrónico: baeloclaudia.ccul@juntadeandalucia.es, y una web: www.juntadeandalucia.es.

Las ruinas de la ciudad romana de Baelo Claudia merecen una obligada visita de todo viajero que le apasione la historia. Para ir entrando en calor, y como viene siendo la norma por estos lares, os dejo con un más que interesante vídeo que ofrece unas espectaculares imágenes del yacimiento acompañadas de una banda sonora adecuada: la de la película Gladiator:

Dónde dormir: Hotel Puntasur; Ctra. Cádiz-Málaga, km 76; 11380 Tarifa (Cádiz); teléfono: 956684326; hotelpuntasur@cherrytel.com.
Dónde comer: Restaurante Hurricane; Carretera N-340, Cádiz-Málaga km. 78; 11380 Tarifa (Cádiz); teléfono: 956684919 y 956684919.