Hispania fue uno de los territorios que a Roma más costó de conquistar en su política de expansión por Europa. Duró dos siglos, hasta que finalmente lo logró en el año 19 antes de Cristo con el fin de las guerras cántabras por Octavio Augusto.
Muy cerca de la estación de esquí de Cabeza de Manzaneda, en la provincia de Ourense, permanecen los restos del campamento de Penedo dos Lobos, la presencia militar romana más antigua que se ha documentado en Galicia. Una fortificación que resultó clave en las guerras asturcántabras (29-19 a.C.)
Con un tamaño correspondiente a un campamento de pequeñas dimensiones con capacidad para albergar hasta 1.000 soldados (2,34 hectáreas), Penedo dos Lobos fue construido en piedra y dispone de las cuatro entradas característica de este tipo de fortificaciones.
Aunque hasta el momento, numerosos especialistas consideraban que la zona de Galicia había estado al margen del conflicto referente a las Guerras Cántabras, lo cierto es que según los expertos que han trabajado in situ directamente sobre la zona, se trataba de un pequeño contingente de militares que ocupó el sitio durante un periodo corto de tiempo.

Zona de pastoreo
El campamento de Penedo dos Lobos se encuentra muy cerca de la estación de esquí de Cabeza de Manzaneda y fue tradicionalmente una zona de pastoreo con vegetación que dificultaba si identificación.
Quizá no fuera tanto un campamento de marcha, construido para descansar durante una o dos jornadas, como un campamento estacional, levantado enteramente en piedra para que resistiera durante un periodo más prolongado de tiempo. Un nuevo hito de la ingeniería romana.
En el recinto los trabajos arqueológicos han permitido descubrir monedas de bronce que fueron acuñadas por Publio Carisio entre 25 y 22 a.C. para pagar a los legionarios que participaron en las contiendas. Así como tachuelas que formaban parte de las caligae (sandalias) de los legionarios.
En mitad del bosque
El misterio se centra en saber porqué se concentraba un contingente de un millar de hombres en mitad de los bosques gallegos y lejos de los fortines más seguros. Es una incógnita que aún los arqueólogos no han logrado responder. Quizá se tratase de una especie de avanzadilla militar que tenía órdenes de entrar en contacto con los pueblos que habitaban la zona.

En la actualidad, los restos del campamento romano se hallan en una zona casi yerma sin vegetación, ya que el área ha sufrido importantes ncendios forestales. La intención del Ayuntamiento es señalizar el lugar y colocar paneles informativos. Galicia es una zona fecunda en vestigios romanos romanos relacionados con las campañas militares.
No en vano, merece destacar la existencia de Aquis Querquennis, también en Ourense, el antiguo campamento de la Legión VII Gemina y una mansio (residencia) que justificó en su día la presencia de estas tropas. De obligada visita si se anda por esta zona.

Dónde dormir: Hostal O Pendón; Ctra. Manzaneda-Raigada, s/n, 32781 O Poboado (Ourense); teléfono: 988333001.
-Pazo da Pena Manzaneda; 32781 Rozavales, Ourense; teléfono: 988333038.
Dónde comer: Os Aarandos; Estación Invernal, 25, 32786 Cabeza de Manzaneda (Ourense); teléfono: 988309090.
-Nevada; Rúa da Cabarca, 5, 32781 Manzaneda (Ourense); teléfono: 988333054.
[xcarousel count=»» condition=»random» order=»DESC» tags=»» featured=»0″ ids=»» cats=»» autoplay=»0″ visible=»»]