Fue el mayor conflicto militar que ha marcado la historia de España. La Guerra Civil ocupa un puesto preeminente en la memoria de nuestro pasado; no en vano resultó una contienda bélica que dejó un trágico reguero de víctimas (se calcula que murieron entre medio millón y un millón de personas) y propició un régimen de Estado totalitario hasta la muerte de Francisco Franco (1975) Una de las batallas más afamadas de aquella guerra, la del Jarama, tuvo en el Cerro Melero de Arganda del Rey (Madrid) a uno de los baluartes más destacados. Ahora, la fortificación se ha musealizado al aire libre para el disfrute del viajero amante de la historia.
El Cerro Melero en Arganda del Rey
En este entorno se conservan una serie de fortificaciones construidas en 1938, entre las que destacan 36 nidos de ametralladora de hormigón rodeados de sacos y un observatorio cubierto desde el que se podía contemplar todo el valle del Jarama. También se han puesto en valor un pozo de tirador, un puesto de fusil ametrallador, dos asentamientos de ametralladora en trinchera, un abrigo excavado para la tropa, un abrigo para el mando y un refugio antiaéreo subterráneo.
El Gobierno republicano levantó este fuerte en el Cerro Melero a mediados de 1938 con la intención de convertirse en la más moderna red de fortificaciones de la República en los distintos frentes que tenía abiertos en Madrid. Meses antes las tropas republicanas habían logrado contener la orensiva lanzada por el Ejército franquista para conquistar la capital, en la que perecieron 10.000 soldados republicanos por 8.000 de los sublevados.
El objetivo era llegar desde Arganda hasta Alcalá de Henares y así asfixiar a la capital, dejarla sin vías de comunicación. De ahí que ante la posible repetición de la acometida se levantara esta línea de defensa.
El Cerro Melero muestra al viajero cómo transcurría la vida en las trincheras por aquella época. Podía acoger hasta una treintena de soldados con un oficial al mando. No obstante, el cerro no fue un punto con gran actividades bélica. Según algunos historiadores, ante los escasos restos de proyectiles encontrados comentan que «es posible que no tuvieran lugar combates en la zona», sino que se trataría de «la retaguardia dentro del frente del Jarama».
Cerro Melero era la última defensa para Arganda ante un eventual ataque franquista. No era un pueblo interesante desde el punto de vista estratégico, pero sí logístico. Se convirtió en un cuartel general republicano a escasos cinco kilómetros del frente. Se levantó en la zona un gran hospital para atender a los heridos y en los edificios oficiales como el Ayuntamiento trabajaron periodistas extranjeros como Ernest Hemingway o John Dos Passos.

A la entrada del museo al aire libre levantado en el cerro hay una escultura conmemorativa, cedida por la Fundación Capa, que representa al Jarama, el río cuyo control costó la vida a miles de personas en sólo unos días. Para el viajero interesado en llegar al sitio, debe saber que tiene que tomar la carretera A3 dirección Valencia y coger salida kilómetro 25. Seguir por Ronda sur hasta la calle Caolín. La visita es libre y es posible realizar visitas guiadas. Para más información escribir al correo electrónico turismo@ayto-arganda.es o llamar al número de teléfono 918711344.
También relacionado con trincheras y contiendas derivadas de la Guerra Civil, otro punto de interés histórico para la visita del viajero es la Línea P, una serie de fortificaciones levantadas por Franco a lo largo de los Pirineos con el fin de impermeabilizar el limes con Francia ante una hipotética invasión tras la conclusión de la Guerra Civil. Si al viajero le apetece no salir de la Comunidad de Madrid puede visitar lugares de interés y notable pasado como Alcalá de Henares, Chinchón o Buitrago de Lozoya.

Dónde dormir: Hotel ibis Madrid Arganda; Avenida de Madrid 105; 28500 Arganda del Rey (Madrid); teléfono: 918729140.
Dónde comer: Restaurante Cisne; Plaza de la Solanilla, 6; 28500 Arganda del Rey (Madrid); teléfono: 918717920.