El placer de viajar no solo radica en el destino, sino también en el viaje en sí. Y ¿qué mejor manera de experimentar un viaje que con la libertad de la carretera en tus propias manos?
Llevamos al viajero a un recorrido en coche a través de dos tierras de gran belleza y rica historia: Escocia y Jordania. Cada uno de estos países, aunque separados por miles de kilómetros y culturas distintas, ofrece una experiencia única e inolvidable a través de sus carreteras.
En Escocia, la tierra de los lagos azules y los castillos imponentes, las carreteras serpentean a través de paisajes espectaculares y sitios históricos que parecen sacados de un cuento de hadas.
Por otro lado, en Jordania, las carreteras te llevan a través del fascinante desierto de Wadi Rum y te conducen hasta la ciudad antigua de Petra, una maravilla tallada en piedra.
Pero no solo vamos a hablar de paisajes y destinos, vamos a sumergirnos en cómo la historia ha moldeado estas tierras y cómo puedes experimentarla de primera mano.
Contexto histórico
Tanto Escocia como Jordania son cunas de historias y culturas fascinantes. Escocia, una tierra de mitos y leyendas, ha sido habitada desde tiempos prehistóricos.
Su historia registrada comienza con los romanos, quienes la describieron como una tierra de feroces guerreros y densas selvas. A lo largo de los siglos, Escocia ha visto reyes y reinas, guerras y revoluciones, y todo esto ha dejado su huella en el paisaje.
Por otro lado, Jordania ha sido el hogar de civilizaciones antiguas desde hace más de 200.000 años. Fue habitada por amonitas, moabitas y edomitas antes de ser conquistada por los romanos, bizantinos y finalmente los árabes.
Es famosa por su hospitalidad beduina, y su historia está impregnada en el desierto y en sus antiguas ciudades.
Al recorrer estas tierras en coche, no solo podrá el viajero admirar la belleza de los paisajes, sino que también podrá explorar su rica historia. Tendrá la libertad de trazar su propio camino a través de estas historias. Ahora, comencemos nuestro viaje con la ruta escocesa.

La Ruta Escocesa
Nuestro viaje épico comienza en la encantadora Edimburgo, la capital de Escocia. Para comenzar el viaje se debe alquilar un coche en Edimburgo, siendo su aeropuerto internacional un lugar idóneo.
El viajero puede hacer un alto antes de emprender la ruta y sumergirse en el apasionante epicentro de Escocia. Con su rica historia y cultura, esta ciudad es el punto de partida perfecto para nuestra aventura.
El imponente castillo de Edimburgo se asienta sobre una antigua roca volcánica, dominando el horizonte de la ciudad con su majestuosidad.
Hay que pasear por la Royal Mile, el camino histórico que une el castillo con el Palacio de Holyroodhouse. Al caminar, uno se transporta a través del tiempo, pasando por callejones estrechos y calles adoquinadas que han visto siglos de historia.
Es hora de tomar un respiro y subir al Arthur’s Seat, un antiguo volcán y punto de referencia local. Desde su cima, se tienen vistas panorámicas de Edimburgo y más allá, proporcionando una perspectiva única de la ciudad antes de comenzar el viaje por carretera.
Con el coche y un mapa en mano, se está listo para embarcarse en esta aventura a través de la historia y los paisajes de Escocia.
Puntos destacados de la ruta
Desde Edimburgo, la ruta nos lleva hacia el norte hasta Stirling, hogar del histórico Castillo de Stirling. Esta fortaleza, situada en lo alto de una colina, fue un lugar de gran importancia durante las Guerras de Independencia de Escocia.
Aquí, el viajero podrá sumergirse en la historia mientras explora sus murallas y recorre sus salas.
Al continuar hacia el noroeste, llegará al Parque Nacional de los Trossachs y Loch Lomond, un paisaje impresionante de montañas, lagos y bosques que ha inspirado a poetas y escritores a lo largo de los siglos.
Hay que asegurarse de detenerse en Loch Lomond, el lago más grande de Gran Bretaña en superficie, y disfrutar de la tranquilidad que ofrece el entorno natural.
Nuestra siguiente parada es Fort William, la puerta de entrada a las Tierras Altas escocesas. Esta encantadora ciudad se encuentra a los pies del Ben Nevis, la montaña más alta de las Islas Británicas.
El viajero puede y debe tomarse un tiempo para explorar el área circundante, que está llena de historia y naturaleza. Visita el Castillo de Inverlochy, una fortaleza en ruinas que data del siglo XIII, y aprende sobre las batallas que tuvieron lugar aquí.
Siguiendo hacia el norte, el viajero llegará al encantador pueblo de Portree en la Isla de Skye. Esta isla es famosa por sus impresionantes paisajes de montañas, acantilados y cascadas.
Uno de los lugares más destacados en Skye es el Old Man of Storr, una formación rocosa distintiva que se eleva sobre el paisaje circundante. También vale la pena visitar el Castillo de Dunvegan, la casa ancestral del Clan MacLeod, que se remonta al siglo XIII.
Al explorar la Isla de Skye, no se debe perder el viajero el Fairy Glen, un paisaje surrealista de colinas verdes y rocas extrañas que parece sacado de un cuento de hadas.
La belleza y la magia de este lugar dejarán asombrado mientras se continúa de viaje a través de la historia y los paisajes de Escocia.
Final de la ruta
Nuestro recorrido histórico concluye en la encantadora ciudad de Inverness, en las Tierras Altas de Escocia. Inverness es una ciudad llena de historia y cultura, y es conocida como la ‘Capital de las Tierras Altas’.
El viajero puede devolver su coche y luego explorar los lugares históricos de la ciudad, como el castillo de Inverness y la catedral de St. Andrew.
A las afueras de la ciudad se encuentra el famoso campo de batalla de Culloden, un lugar conmovedor que desempeñó un papel crucial en la historia de Escocia. Esta ciudad es el final perfecto para nuestro viaje en coche a través de la historia escocesa.

La Ruta Jordana
Nuestra aventura comienza en la vibrante ciudad de Amán. Esta ciudad, una de las más antiguas habitadas continuamente del mundo, es un lugar donde lo antiguo y lo moderno se entrelazan de manera única.
En Amán tienes numerosas opciones de alquiler de coches. Tómate tu tiempo para encontrar el vehículo que mejor se adapte a tus necesidades, y ten en cuenta que un coche 4×4 es una buena opción en Jordania.
Amán es una ciudad construida sobre colinas, con una historia que se remonta a los tiempos bíblicos. En su centro, el viajero encontrará la Ciudadela de Amán, un antiguo y elevado lugar histórico que ofrece vistas panorámicas de la ciudad.
Aquí, puede explorar restos de civilizaciones pasadas, incluyendo el Templo de Hércules y el Palacio Omeya. No muy lejos de la Ciudadela, el Teatro Romano, que data del siglo II, es un testimonio del pasado romano de la ciudad.
En el centro de la ciudad, el bullicioso mercado de Al-Balad ofrece una inmersión en la cultura jordana, con su variedad de productos locales, alimentos y artesanías.
Con la riqueza de la historia y la cultura de Amán al alcance, se está listo para comenzar el viaje en coche a través de Jordania, un país que ofrece una asombrosa variedad de paisajes y tesoros históricos.
Puntos destacados de la ruta
Desde Amán, la ruta nos lleva a Jerash, uno de los sitios de ruinas romanas más completos y mejor conservados del mundo.
Aquí se puede caminar por el antiguo Cardo Máximo, admirar el impresionante Arco de Adriano y el Templo de Artemisa y sentirte transportado a la época del Imperio Romano.
A continuación, hay que dirigirse hacia el suroeste hasta el Mar Muerto, el punto más bajo de la tierra y una maravilla geográfica. Darse un baño flotante en sus aguas ricas en minerales es una experiencia única.
También se puede disfrutar de las propiedades terapéuticas del lodo del Mar Muerto, conocido por sus beneficios para la piel.
Desde el Mar Muerto, la ruta continúa a lo largo de la antigua Carretera del Rey hasta la ciudad de Madaba, famosa por su mosaico del siglo VI que representa un mapa de Tierra Santa.
Muy cerca se encuentra el Monte Nebo, tradicionalmente considerado el lugar donde Moisés vio la Tierra Prometida antes de morir. Después, nos debemos dirigir al sur hacia el impresionante Wadi Rum, también conocido como el Valle de la Luna.
Este desierto de arenisca y granito es famoso por sus formaciones rocosas naturales y por su conexión con Lawrence de Arabia. Aquí se puede experimentar la hospitalidad beduina y explorar el deslumbrante paisaje en un viaje en camello.
Finalmente, la joya de la corona de Jordania: Petra. Esta ciudad antigua, esculpida en la roca rosa hace más de 2.000 años por los nabateos, es un testimonio del ingenio y la habilidad humana.
El ingreso a través del Siq, un estrecho desfiladero, que se abre al impresionante Tesoro, es un momento de pura magia que encapsula la rica historia y la belleza natural de Jordania.

Final de la ruta
El final de nuestro recorrido es la encantadora ciudad portuaria de Aqaba, situada en el extremo sur de Jordania. Aquí el viajero puede devolver el coche y disfrutar de las relajantes playas del Mar Rojo.
Aqaba tiene una larga historia que se remonta a los tiempos bíblicos y fue un importante centro comercial en la antigua ruta del incienso.
Hoy en día, la ciudad es famosa por sus arrecifes de coral, su animada vida marina y su fortaleza mameluca. El final perfecto para tu viaje en coche a través de la rica historia y geografía de Jordania.
Comparación y contraste
A primera vista, Escocia y Jordania podrían parecer mundos aparte. Sin embargo, al explorar estas dos naciones a través de las rutas en coche propuestas, empezamos a apreciar no solo las diferencias sino también las sorprendentes similitudes.
Ambas rutas nos llevan a través de paisajes que son excepcionales en su belleza y diversidad.
En Escocia, viajas desde las bulliciosas calles de Edimburgo hasta las serenas Tierras Altas, pasando por lagos brillantes y montañas escarpadas.
En Jordania, tu viaje te lleva desde la historia viva de Amán hasta el paisaje desértico de Wadi Rum, pasando por montañas, el Mar Muerto y antiguas ciudades nabateas esculpidas en roca.
Aunque los paisajes son distintos, ambos países te ofrecen una experiencia inolvidable de conexión con la naturaleza. En términos de historia, tanto Escocia como Jordania albergan sitios que son testimonio de las civilizaciones que han moldeado nuestro mundo.
En Escocia, exploras castillos y campos de batalla que nos hablan de las Guerras de Independencia. En Jordania, caminas por antiguas ciudades romanas y nabateas, y lugares de importancia bíblica. Estos viajes en el tiempo te permiten comprender mejor la historia de la humanidad y la evolución de las civilizaciones.
En cuanto a la experiencia de viaje, ambas rutas ofrecen una combinación de aventura, cultura e historia. En cada país, puedes experimentar la hospitalidad local, ya sea en una posada escocesa o en un campamento beduino.
Ambas rutas te permiten viajar a tu propio ritmo, descubriendo tesoros ocultos y haciendo tus propios descubrimientos.
En resumen, aunque Escocia y Jordania ofrecen experiencias únicas, ambas rutas comparten un enfoque en la belleza natural, la rica historia y la auténtica experiencia cultural.
Los ecos del pasado resuenan en cada parada, enriqueciendo la experiencia de viaje y conectándonos con las historias que han moldeado nuestro mundo.
Al final, estos viajes por carretera nos recuerdan que, sin importar dónde estemos, la historia está siempre a nuestro alrededor, esperando a ser descubierta.